jueves, mayo 10, 2018

Lo que importa


Imaginemos que hay un árbol. Es importante que lo imaginemos de a poco y en detalle, que le demos importancia a cada relieve de la corteza, a las raíces, a las ramas y a las hojas.  Lo que importa es que lo creemos y lo creamos del todo. Que sea convincente, eso es lo importante. Luego, con el tiempo, pongámosle frutas al árbol que imaginamos y, mientras lo hacemos, pensemos en su importancia. Pueden ser manzanas u otras frutas, pueden incluso ser peras o limones. Lo importantes es que imaginemos que hay un árbol y que ese árbol tiene frutas. Pero, y esto es importante, no imaginemos frutas venenosas. Es muy importante que imaginemos frutas comestibles. Esto último es muy importante, porque las frutas venenosas que sean imaginadas, lamentablemente no podrán ser comidas cuando estén maduras. Aunque es importante notar que esto también es cierto sobre las frutas imaginadas que sí sean comestibles, ya que al ser imaginarias, no pueden ser comidas, así esta distinción no es del todo importante.

FIN

Quiero aclararle a mis lectores que este cuento en realidad es una metáfora sobre las cosas, las gentes y las vidas. No quisiera que alguien lo tomara literalmente y se estresara dándole importancia a algo. Nada, en realidad, es muy importante.